
No hace falta entrar en muchos detalles para decir sobre que trata El exorcismo de Emily Rose, además de que nos recuerda al clásico film El exorcista, aunque una vez vista observamos que son muchas las diferencias entre ambas. Emily Rose es una joven chica de 19 años que inicia sus estudios en la universidad, en la que también se aloja, y allí es donde comienza a sufrir alucinaciones, espasmos y aparentes ataques de seres imperceptibles a la vista. Es católica y visto que el sufrimiento y tormento que padece no se le soluciona con medicamentos, entonces deciden practicarle sesiones de exorcismo. En una de estas sesiones, la más violenta, Emily muere por parte de uno de estos entes satánicos.
Todo esto provoca que se proceda con un juicio sobre el padre, Richard Moore, a quien se le culpa de la muerte de la chica por una supuesta negligencia en la práctica de dicho ritual. Su abogada (Laura
Linney) se ve inmersa en una serie de eventos y dificultades para comprobar la inocencia de su defendido.

El abogado de la otra parte, intenta desacreditar los sucesos sobrenaturales que ocurrieron. En la película es innegable que el exorcismo fue justificable, ya que como ocurrió a finales de los 70’ ya se podían encontrar motivos científicos y casos psiquiátricos como respuesta. Los elementos sobrenaturales y sin explicación hacen pensar que Emily era castigada por demonios que terminaron con su vida.
Incluso la propia abogada del padre Richard Moore es testigo de algunos de estos sucesos inexplicables. El hecho real en el que se basa esta película es el de Anneliese Michel, que en aquella época recibió el permiso y aprobación de la iglesia católica para que se le realizase el ritual de exorcismo. El film fue dirigido por Scott Derrickson y fue estrenada en 2005. Puede resultar un poco pesada por momentos, pero por lo demás es bastante interesante.